Después de ver los vinos nos estuvo explicando el primer piso: como llega la uva, se prensa y se mete en las cubas:
Una vez pasado el tiempo necesario, se pasan a las barricas del piso inferior durante un tiempo determinado por el tipo de vino oyendo música clásica. Obviamente en tiempo de cuaresma, nada mejor que un Requiem, jeje:
Una vez explicadas los diferentes tipos de toneles, las, tiempos y embotellados, pasamos a ver la pedazo de sala de recepción que se ha montado el Juan Antonio (esto es nuevo respecto a la primera visita). Se sube por una escalera de caracol a una sala con un ventanal hacia la bodega para que se pueda ver como se va haciendo el rico vino de Liberalia.
Y de aquí otra vez al primer piso de la bodega a La Cata. Juan Antonio nos ofreció primero vino recién sacado de las cubas, para probar el vino sin hacer, aunque incluso así estaba bueno. Eso si, los taninos dejan un sabor de boca demasiado fuerte. Después empezó a sacar de la última cosecha, primero un 0, rico, rico y luego un 4, excelente. Todo a la vez que comíamos chorizo, cecina (uhmm) y queso (arggg). Para poner la guinda, nos dió a probar el 1, moscatel, que hizo las delicias del grupo, impresionante con queso! aunque hay que probar la otra propuesta, con foie! Con este postre nos fuimos contentos de allí y "a comer perdices" en "El Chivo" en Morales de Toro, pero eso lo contamos otro día...Continuará...
PD: Mirando en la página de Liberalia dice que el 1 también hace buen maridaje con queso azul. Habrá que probarlo también!!!
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